
Más de 170 incendios forestales avanzan por el centro-sur de Chile y arrasan más de 8000 hectáreas. Han dejado más de un centenar de casas afectadas, cuatro muertos y varios heridos. Por esta situación, el presidente Gabriel Boric decidió suspender sus vacaciones para viajar a las regiones de Ñuble y Biobío, zonas decretadas en Estado de Excepción Constitucional de Catástrofe debido a la magnitud de las llamas. Los focos también afectan a las regiones de Maule y La Araucanía.
Según el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred) y la Corporación Nacional Forestal (Conaf), esta mañana había 178 incendios activos, de los cuales 39 estaban siendo combatidos. Las llamas afectaban unas 8000 hectáreas y había 107 viviendas con algún tipo de daño.
“He decidido decretar Estado de Excepción Constitucional de Catástrofe para la Región de Ñuble. Juntos, enfrentamos la emergencia con la mayor fuerza posible”, escribió en su cuenta de Twitter el presidente de Chile, Gabriel Boric.
He instruido decretar Estado de Excepción Constitucional de Catástrofe para combatir los incendios forestales que afectan a la Región de Biobío y velar por la seguridad de las personas. Visitaré la Región de Ñuble y Biobío para acompañar a las familias. Estamos con ustedes!
— Gabriel Boric Font (@GabrielBoric) February 3, 2023
Horas después, la ministra del Interior, Carolina Tohá, anunció que también había sido declarado el estado de catástrofe en Biobío. A raíz de esta emergencia, Boric decidió suspender sus vacaciones para trasladarse a la zona.
La declaración del estado de catástrofe, un estado de excepción constitucional, permite medidas como la disposición de recursos adicionales para controlar la emergencia e ir en ayuda de los afectados, y la utilización de fuerzas militares en esta situación de emergencia.
Primero la ministra Tohá, habló de cuatro víctimas. “Tenemos que lamentar (…) la confirmación de cuatro personas fallecidas. Son personas que se desplazaban en vehículos”, en la localidad de Santa Juana, en la región de Biobío.
La funcionaria explicó que dos de las víctimas murieron tras ser alcanzadas por las llamas cuando transitaban por una camino, mientras que las otras dos fallecieron por un accidente de tránsito “probablemente tratando de escapar del fuego”.
Más tarde se informó de una quinta persona fallecida, también en Santa Juana: una voluntaria del cuerpo de bomberos de esa localidad.
Toda la región de Ñuble está declarada en alerta roja, y también estaban en esta condición siete municipios de Biobío, tres de La Araucanía y una de la región de Maule.
El Senapred informó que desde el miércoles ha enviado 48 mensajes del Sistema de Alerta de Emergencia para Celulares (SAE) en los que solicitó la evacuación de algunas zonas pobladas. En el combate del fuego trabajan 75 aeronaves y más de 2300 brigadistas.
Los incendios, desatados en medio de una ola de calor extremo con registros cercanos a los 40ºC, hacen temer una nueva catástrofe como la que se vivió a comienzos de 2017.
Entonces se produjo un megaincendio forestal que afectó a tres regiones del centro-sur del país y que dejó 11 muertos, unos 6000 damnificados, más de 1500 viviendas destruidas y 467.000 hectáreas.
