Al menos 22 personas murieron el sábado en una estampida durante una actividad filantrópica que distribuía alimentos y aceite vegetal a los lugareños antes de las celebraciones navideñas en Okija, una localidad del estado de Anambra, en el sureste de Nigeria, informó hoy domingo la Policía.
El portavoz de la Policía de Anambra, Tochukwu Ikenga, confirmó en un comunicado que «había heridos que recibían tratamiento en hospitales locales», pero no dio una cifra exacta tras el fatal incidente ocurrido el sábado por la mañana.
Añadió que se ha llevado a cabo una investigación sobre el incidente.
Además, el jefe de la policía nacional nigeriana, Kayode Egbetokun, ha lanzado una fuerte advertencia contra la desorganizada «distribución de paliativos y ferias de atracciones», que han provocado recientemente estampidas y víctimas mortales entre los ciudadanos vulnerables del país.
Egbetokun declaró el sábado que la advertencia se producía en respuesta al creciente número de estampidas con resultado de heridos y muertos, especialmente durante las distribuciones paliativas antes de la celebración de la Navidad, calificándolas de «descoordinadas».
El miércoles, al menos 35 personas murieron y seis resultaron heridas de gravedad en una estampida durante un carnaval infantil en la ciudad suroccidental de Ibadan.
Además, el sábado, al menos diez personas, entre ellas cuatro niños, murieron y otras ocho resultaron heridas en otra estampida durante la distribución de artículos de socorro en una iglesia local del distrito de Maitama, en la capital nigeriana, Abuya.
El presidente de Nigeria, Bola Tinubu, pidió el sábado a las autoridades estatales y locales que apliquen medidas estrictas de control de multitudes en todo el país, tras los incidentes mortales.
«Las autoridades locales y estatales no deben seguir tolerando fallos operativos por parte de las organizaciones y corporaciones que participan en actividades caritativas y humanitarias», declaró Tinubu.