
El Institut d’Investigació en Atenció Primària Jordi Gol (IDIAPJGol) ha liderado un estudio que concluye que no es recomendable iniciar tratamiento preventivo con aspirina en personas mayores de 60 años con alto riesgo cardiovascular. La investigación, publicada en la Journal of Clinical Medicine, advierte que en este grupo etario los efectos adversos superan los posibles beneficios.
Aspirina: beneficios en menores de 60, riesgos en mayores
El análisis se basó en datos reales de más de 37.000 pacientes con alto riesgo cardiovascular atendidos en Cataluña entre 2006 y 2020, que no habían sufrido infartos ni ictus previos.
En personas de entre 40 y 59 años, el tratamiento preventivo con aspirina redujo de manera significativa el riesgo de enfermedad aterosclerótica cardiovascular.
En los mayores de 60 años, en cambio, no se observó efecto protector y sí un aumento de riesgo de úlceras y hemorragias gastrointestinales, lo que hace desaconsejable su uso.
Aspirina y prevención cardiovascular
Los investigadores recordaron que hasta el 99% de los infartos e ictus están asociados a factores de riesgo prevenibles. Por ello, subrayaron que antes de optar por fármacos como la aspirina, es clave priorizar hábitos saludables como la alimentación equilibrada, el ejercicio físico regular y el control de la presión arterial.
Lia Alves, primera firmante del estudio, destacó que los resultados “aportan evidencias del mundo real en línea con las recomendaciones internacionales”. Por su parte, el investigador principal, Rafel Ramos, señaló que la prevención debe centrarse en la promoción de la salud y no únicamente en la medicación.
Aspirina y cáncer de colon
Aunque la investigación se centró en el ámbito cardiovascular, otros estudios previos han indicado que ciertos tipos de cáncer de colon parecen responder bien al tratamiento con aspirina, lo que abre nuevas líneas de investigación sobre sus posibles usos en oncología.