Una mujer de 43 años fue asesinada a puñaladas por su exnovio en medio de un parque de la localidad brasileña de Carapicuíba, en el Gran San Pablo, el domingo por la tarde. El brutal femicidio ocurrió frente a la hija de la víctima, que tiene apenas 3 años.
La víctima, Neusa Almeida da Silva, llegó al parque que solía frecuentar alrededor de las dos de la tarde, acompañada de su hermana y su hija.
Como el lugar estaba lleno, salieron a caminar por una zona más apartada, donde se toparon con Gecival de Oliveira Cruz, de 40 años, expareja de Neusa y padre de la nena.
El hombre se acercó a la víctima y comenzó a apuñalarla. Neusa intentó correr, pero se tropezó y cayó al piso. Oliveira Cruz se le abalanzó y le atestó golpes y puñaladas en distintas partes del cuerpo.
En una declaración a la policía, la hermana dijo que gritó para pedir ayuda mientras sostenía a su sobrina en su regazo, pero nadie intervino. Cuando Neusa parecía ya muerta, Gecival detuvo los ataques y huyó. En ese momento la gente empezó a acercarse.
Neusa fue llevada de urgencia a un centro médico, donde finalmente murió. La mujer había recibido múltiples puñaladas en el pecho, los brazos, la cabeza y la espalda.
Cuando la policía llegó al parque, también encontró a Oliveiro Cruz muerto en el lugar. El atacante presentaba varias heridas, especialmente en el rostro.
La hermana de Neusa afirmó desconocer las circunstancias de su muerte. Para su examen forense se incautaron de dos piedras y un trozo de madera manchado de sangre que se encontraban cerca de su cuerpo. La autoría del crimen aún se desconoce.
El caso fue registrado como femicidio en la Comisaría de Defensa de la Mujer de Barueri y será investigado por el 2º Distrito Policial de Carapicuíba.
Historial de violencia de género
Según indicaron familiares de la mujer, Neusa y Gecival salieron durante unos meses y tuvieron una hija, la nena que presenció el crimen. Apenas nació, pusieron fin a la relación, que estaba marcada por los celos y la posesividad de Oliveira Cruz.
Hace unos años, Gecival habría ido al trabajo de su ex y habría intentado matarla con un cuchillo. Pese a la gravedad del hecho, no se hizo la denuncia.
El autor del crimen no tuvo más contacto con su hija y nunca pagó por la manutención de la nena.
Al revisar sus antecedentes penales, la policía encontró un informe policial elaborado hace 10 años en el que otra mujer lo acusaba de violencia de género.