Rusia informó este domingo que drones ucranianos habían atacado cuatro regiones distintas, hiriendo a cinco personas y obligando a dos aeropuertos de Moscú a desviar brevemente sus vuelos.
Las regiones rusas de Kursk, Rostov y Belgorod, todas ellas fronterizas con Ucrania, informaron de intentos de ataques con aviones no tripulados, mientras que el Ministerio de Defensa afirmó haber bloqueado un dron ucraniano en la región de Moscú, obligándolo a estrellarse en una zona despoblada.
El organismo ruso de control de la aviación señaló que había interrumpido brevemente los vuelos a los aeropuertos de Vnukovo y Domodedovo en respuesta a las incursiones.
El gobernador de la región de Kursk indicó que cinco personas habían resultado heridas y que se había declarado un incendio en la estación de ferrocarril de la ciudad homónima. El gobernador de Rostov declaró que no se habían producido heridos ni daños.
Más tarde el domingo, el Ministerio de Defensa de Rusia aseguró que había evitado dos ataques con drones en la región de Belgorod, la provincia fronteriza más atacada del país. El gobernador local dijo en Telegram que 12 objetivos aéreos habían sido derribados en los accesos a la ciudad de Belgorod.
Los ataques de drones ucranianos tanto en regiones fronterizas como en la capital rusa se han vuelto cada vez más habituales en los últimos meses, con repetidas incursiones en el distrito financiero de Moscú.
Rusia declaró en mayo que dos drones ucranianos habían intentado atacar el Kremlin.
Ucrania no suele comentar quién está detrás de los ataques en territorio ruso, aunque sus funcionarios han expresado públicamente su satisfacción por ellos.